Ya no soy tan correcta como aquel entonces. Pero algo que me desestructure y me disperse en noventa pedazos sería la conexión perfecta entre lo que quiero decir y lo que no me sale.
(bio-tiempo)

pero nunca me pregunté
si vos,
todo entero
fueses un espejismo...

entre plantas

Gastarse en coleccionar palabras
¿para qué?
suicidarse en el intento
escupir el diccionario entero
y estallar por vivir tanto en un solo momento.
Ocurre que la vida queda tan lejos
que no sería capaz de acercarse a tocarla.
Inerte;
las raíces y los frutos...
todos bajo tierra,
sepultándose
¿para qué?

Mientras tanto,
en el otro barrio
el amor que se muere de miedo por no saber que más decir*

.submarino.

Un día fuera de todo,
y todo para mí.
A punto de probar(te)
A un segundo de caer(me)…

Perdiendo
todas las nociones;
Salvando el instante
donde el viento,
trajo algo más que el frío.

Y cómplices,
las sonrisas
que reservaron el momento.

ni sé/ni contesto

No sé
No sé
No sé
Como hacer para que me veas
para asomarme sin levantar la mano,
y te des cuenta que vine tarde.
Que alguna realidad me cayó a la panza
y me llama,
curiosa
intacta,
casi adolescente.

Vendrías,
si estoy a tiempo de recorrerte?

Transición

La luna está menguando…
Y es que algo tendrá que ver.

Se me cruzan días extraños;
Como un gato negro,
como un paraguas dentro de la casa.

Es la mala racha
o la falta de oración.
Se me planta un instante inconcluso
Ineludible y
no sé bien
para dónde tirarlo
(no lo sé)

Me hace;
y me deshago
en esos días
raros,
donde la luna
sigue queriendo llenarse
donde,
supongo yo,
se originan
las causas de mis días.

Donde menguar
no es extraño;
donde el instante
es mudo
y queda solamente
la conclusión del ciclo.

Decires demás

Sensaciones baratas para no tener
cuestiones para desmembrar
Odios infundados
y toda la mugre que tenés para limpiar.

Es el nunca tomar conciencia del daño moral.
Es la pérdida gradual de la cordura,
el no buscar mas opciones
para calmar,
para vivir,
el resto de las cosas.

Es siempre aguantar un poco más.

Hasta que se me pudran los oídos
Se me rompan los ojos
y se me caigan las manos.

El silencio se quiebra en un suspiro…

La costumbre,
es la puta costumbre que no se desgarra nunca.

Pero yo sí.

el parral de los deseos*

Roja la sangre,
como el fruto
que corre por tus venas.
Se hace piel
y desintegra en el cuerpo.
Se disemina,
te envuelve
y te quema.
Hierve el instante;
más vivo que nunca
y enloquece,
por fundirse en tu boca.

Acá lejos

No me fui de este mundo
Sigo acá,
caminando las paredes
y saltando en los techos.
Sentada en una nube;
surcando los cielos
mirando las alas,
volar entre mis pies.

(Estoy acá.
Y es que nunca me fui.)


Hay un corte,
donde siempre.
Mi norte y mi sur
se despegan,
se desarman
y no queda más
que inmolarse,
Ahí,
donde confluyen
las palabras
y los hechos.


Este es mi juego demente
ácido como tus palabras
…sucio como tu cara.
Esta noche
mi vocabulario no es el mismo,
tengo cartas bajo mi falda
porque ya no hay mangas sin reverso.

Tengo una carta perdida
en el mar de las causas
que dice;
que Estoy acá,
que sepas…
que Nunca me di por muerta.

Carne viva

No puedo gritar,
Por acá
Y por allá
Si ni mi conciencia me escucha.

Me faltan muchos mares por llenar,
Muchas sombras por matar
E inundar mi casa de paz.

Vaciarla por completo

Que no quede nada...

De nada.

El fin explota en un segundo,
y es tan solo eso necesario
para respirar.

Dame ese segundo
de tu muerte.
Regalame vida
que me ahogo,
que me asfixio.

…Que me opaco y me extingo.

(!)

Esto fue
lo que dejamos morir,
A la luz de una vela.

Esto es,
un ensayo
de nuestra negligencia
de cada día.


DESPERTAME,
Que este sueño
se siente
en carne viva.

rompe-cabezas

Dejé,
que el viento lleve
lo amargo en los besos.
Que el tiempo desgarre
los residuos
de un cuento cruzado.

Me abstengo,
de dar letra a la muerte
que se parte en dos.
Hago un voto de silencio
en mi favor,
para que los días enseñen,
las noches abracen...
y en el medio;
junto al rocío
Caer.

Lenta, y Dulcemente.

"Es, un romántico del presente, un nómade sentimiento..."

Su velo me huele a calma,
él es una estrella que brilla con luz propia
y no lo conozco.
Pues solo recuerdo su sonrisa y sus ojos
Una voz muy dulce,
parece un niño sin edad.
La sensibilidad intacta de un hombre..
¡Qué burda soy al compartir mis palabras!
si, soy rustica y desprolija,
lo sé.
El alma se me viene a las manos
y me dibujo en las hojas...
Me perdí en el tiempo,
y también lo sé.

Él me recuerda,
aunque no lo conozca
al Principito.
Y vuelo de copa en copa
en sintonía con la brisa,
Porque me remitió a la calma
y fuimos amables y agradecidos,
como escalonando nubes
para nutrir el alma.
Hasta pareciera uno de los pocos
entre la muchedumbre de los Cotidianos.

Él es el niño sin edad,
que canta sofisticado
un pesar.
Que vibra misterioso
al amar.
Un viajero de los años que no son
que guardará maravillas
en algún lugar de su mundo.

Me da la sensación...
Y ahora,
me pregunto yo
¿Cómo es que escribo sobre quien no conozco?